AFP.


Frente a la amenaza de que Estados Unidos deje de venderle aviones F-35, Turquía presentó este lunes en el salón aeronáutico de Le Bourget su propio proyecto de avión furtivo de quinta generación, el TF-X, que calificó de "mejor caza de Europa".

Por el momento solo se trata de la maqueta de un biarrector que fue presentada en el salón internacional que se celebra en las afueras de París.

"Prometimos a nuestro país que sería el mejor caza de Europa", dijo el presidente de la empresa pública Turkish Aerospace, Temel Koti, que lidera el proyecto.

La compañía tiene acuerdos con la británica British Aerospace para el diseño del futuro avión, que contará con motores de General Electric a la espera de que se puedan fabricar en Turquía.

El proyecto empezó en 2013, el primer vuelo está previsto en 2025 y la entrada en servicio en 2028.

"El desarrollo de una industria local de defensa fuerte y autosuficiente es una prioridad para el gobierno turco", explicó a la prensa Abdurrahman Can, el subsecretario turco de Defensa.

El pasado 31 de julio el presidente estadounidense Donald Trump lanzó un ultimátum a Turquía para que renuncie a comprar baterías rusas de misiles anti-aéreos S-400, que no son compatibles con los sistemas de la OTAN.

Si Turquía no cede, el país dejará de estar considerado como un socio industrial de Estados Unidos en los F-35 –de los que Turkish Aerospace construye partes del fuselaje central– y no podrá comprar los cien aparatos que tenía previstos.

"Hay algunos problemas", reconoció este lunes Abdurrahman Can. "Por eso nuestra intención es concentrarnos en los productos nacionales", aseguró.